TORTILLA GUISADA

La primera vez que comí tortilla guisada, fué en León, en Valdevimbre. Es un pueblo que se caracteriza por tener un montón de bodegas y restaurantes hechos dentro de cuevas. La comida es genial y las cuevas, chulísimas:



Si teneis oportunidad, no dejeis de ir, estoy segura de que os encantarán!



Pues nada, inspirada en aquella tortilla guisada que comí por primera vez en Valdevimbre y que me supo a gloria bendita, hice mi versión light! Sin apenas aceite y con una salsa de tomate natural, para darnos un homenaje sin tener remordimientos... Bueno, eso si no haceis como yo, que tengo que confesar que no me aguanté y mojé pan!! jejeje...




INGREDIENTES:

* Patatas
* Huevos
* Cebolla
* Tomate triturado con cebolla (Mercadona)
* Ajos
* Laurel
* Pimentón
* Vino blanco
* Aceite y sal





PREPARACIÓN:

Pelamos las patatas y las picamos en láminas pequeñas y finas. Hacemos lo mismo con la cebolla. Ponemos todo en una bolsa de asar para microondas con media cucharada de aceite de oliva y cocinamos a potencia máxima hasta que las patatas estén tiernas. También las podríamos hacer cocidas.

Una vez listas, mezclamos con los huevos batidos y hacemos la tortilla. La haremos sólo "vuelta y vuelta" ya que luego terminará de cuajarse en la salsa.





Para hacer la salsa de tomate: Ponemos una cucharada de aceite en una sartén, rehogamos un par de ajos y cuando estén dorados añadimos la lata de tomate triturado con cebolla, la hoja de laurel y el vino blanco. Dejamos reducir todo a fuego suave. Una vez listo salpimentamos, corregimos de acidez con un poco de azúcar si hace falta, y añadimos un poco de pimentón (yo le puse mitad dulce y mitad picante)

Sólo nos queda meter la tortilla dentro de la salsa para que se acabe de cocinar y dejar unos minutos a fuego medio.